Aprovechando que hace frío y he encendido la cocina de leña, he hecho sopa de ajo.
Lo primero poner aceite en una tartera y añadirle unos cuantos dientes de ajo, una vez que están dorados, yo los saco para ponérselos al final ya que no me gusta que cuezan tanto rato, eso es al gusto de cada uno
Cortar pan de pistola, aquí lo llamamos !sopako! en rodajitas delgaditas, y añadirlas al aceite, darle unas vueltas para dorarlas, una vez de que ya lo estén se le pone un poco de pimentón, a mi me gusta más ponerle un poco de tomate hecho, añadir agua y dejar que se vaya cociendo poco a poco, añadirle sal y si se quiere una pastilla de caldo, también hay a quien le gusta ponerle un trozo de guindilla picante, yo se la he puesto, cuando ya está bien cocido el pan se prueba de sal, se rectifica si hace falta, se le ponen los ajos que estaban reservados y ya está, se puede enriquecer batiendo unos huevos y añadiéndoselos para que cueza un par de minutos o poner un huevo en cada plato y hecharle la sopa encima, esto queda muy vistoso delante de los comensales.
No tiene que quedar muy caldoso.
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